El comercio electrónico en el mundo crece a un ritmo constante todos los años, pero las transacciones que se realizan en digital siguen siendo muy inferiores a las que se hacen por canales físicos. Por eso aquí te contamos tres claves por las que profesionalizar el testing puede hacer la diferencia para el comprador online

1. Ayuda a optimizar la experiencia de Usuario

Son muchas las razones por las que una persona interesada en un producto puede acabar no comprándolo. Por ello es importante evaluar en qué etapa del canal se está “perdiendo” al cliente potencial.

Si en un shopping la persona pasa por la puerta del local, pero no entra podremos suponer que se debe a cómo está presentada la vidriera. Si entra y ante la pregunta del vendedor, se marcha, podemos suponer que hay un problema de atención. Y si tras elegir un producto se va porque la cola es numerosa, podemos suponer que el problema no está en el producto ni en los vendedores, sino en la disposición del tiempo.

En un eCommerce no vemos al comprador real, pero podemos inferir qué piensa y siente a partir de las decisiones que toma como usuario. ¿Estamos plenamente seguros de que todas las etapas de la compra están coordinadas y que todas las páginas ayudan a generar la misma experiencia? ¿Los campos y la información solicitada están programados de manera funcional? ¿Los atributos que hacen atractivo al producto se mantienen hasta la compra?

2. Mejora la coordinación con el método de pago

Ingresar los datos de la tarjeta, aceptar los términos y condiciones, dar enviar y recibir una respuesta frustrante: “No se ha podido completar la transacción”. Todos hemos pasados por esa experiencia en alguna oportunidad con la convicción de que el problema estaba en el sistema y no en nuestra tarjeta. Y sabemos que salvo que la operación sea de inevitable, las chances de repetir la operación disminuyen.

Un testing profesional permite adelantarse a esas situaciones e identificar posibles problemas. ¿Cómo evitar que nuestro comercio entre en la lista negra de las entidades financieras? ¿Existe riesgo de que el cobro se haga por duplicado o no se procese? ¿Qué aspectos de soporte no se están considerando para que el software de eCommerce alcance la calidad necesaria?

3. Pruebas de estrés garantizan momentos de gran intensidad.

Uno de los grandes desajustes entre lo comercial y lo operativo es lo que se llama morir de éxito: cuando una empresa no está preparada para recibir un flujo de ventas de repente y no puede dar abasto a la demanda. En muchas empresas se da a lo largo del tiempo, pero en muchos comercios puede ocurrir en unas pocas horas en fechas especiales, como el Cyber Monday o en campañas con precios especiales.

Por eso las pruebas de estrés permiten identificar cuál es la preparación que tiene el software para atender múltiples compradores al mismo tiempo. Para hacer la comparación con la tienda física, la prueba de estrés nos permite saber exactamente hasta cuántos “vendedores” podemos colocar en nuestro eCommerce. Considerando las ventajas y la comodidad que ofrece la compra online, conocer ese límite debería ser crítica para todo negocio de venta online masiva.